1)El poema Rosa Divina usa el símbolo de la belleza como ejemplo de la fortaleza que finalmente es imaginativa y la delicadeza como ejemplificación de la realidad que es la naturaleza vulnerable y la inevitable muerte. También ejemplifica la relación o semejanza entre la naturaleza de las rosas y los hombres. En el poema Engaño Colorido simboliza a la belleza como un engaño de los sentidos al ser esto solo apariencia de la verdadera naturaleza de los seres, al igual que en Rosa Divina simboliza el ciclo de la vida como algo fugaz y la superficialidad de las apariencias como podría ser la belleza.

2) En el poema Rosa Divina, trata la similitud de la naturaleza humana y de las rosas, de cómo la vida es una alegría y más la juventud pero que ambos tienen el mismo destino que es la muerte, y de la fortaleza que ejemplifica la juventud y de cómo se pierde la fuerza con el paso del tiempo. (Amago de la humana arquitectura, la cuna alegre y triste sepultura. Presumida, soberbia, y luego desmayada y encogida).

En el poema Engaño Colorido trata la falsa realidad que es la belleza ya que esta es completamente pasajera y de cómo apegarse a ella es inútil, ya que esta es solo una ilusión de una realidad completamente pasajera. (Éste que ves, engaño colorido, es cauteloso engaño del sentido; es un afán caduco y, bien mirado, es cadáver, es polvo, es sombra, es nada).

3) En estos poemas de Sor Juana se expresa la idea de que sin importar la grandeza que pueda sentir uno, no es más que un ser como cualquier otro, de la banalidad de la belleza que no significa nada al paso del tiempo y de la vida, y de no centrar la propia vida en estas ilusiones que no significan nada en la realidad. (¡Cuán altiva en tu pompa, presumida, soberbia, el riesgo de morir desdeñas. Pretender excusar de los años los horrores, es un resguardo inútil, es una necia diligencia, es un afán caduco).

Bibliografía.

• Rosa Divina, Que en gentil Cultura. Sor Juana Inés de la Cruz.
• Estos versos lector mío. Sor Juana Inés de la Cruz.
• Poema este que ves, Engaño colorido. Sor Juana Inés de la Cruz.